El Certamen de Calidad de Vinos de la DO Jumilla fue uno de los pocos acontecimientos que no se vio interrumpido el pasado año por culpa de la
maldita pandemia. Sí se vio afectado, porque hubo de cambiar su escenario y las catas se celebraron en Madrid aprovechando una “ventana” en las fechas de restricciones de movimientos y reuniones. Y lo sigue estando, porque este año tampoco habrá gala de entrega de premios, pero ha conseguido mantener su cita anual, una de las destacadas y ya una de las clásicas en el calendario español de catas de vinos. En la edición de 2021, la vigésima séptima consecutiva, siempre bajo la dirección de Enrique Calduch, el concurso regresó a Jumilla, su sede habitual, aunque en algunas ocasiones viaja a Albacete para cumplir con la parte castellanomanchega de la DO Jumilla.
En torno a 150 vinos han participado en una cata en la que se constata, además de la consolidación de los estilos ya consolidados en los vinos tintos y rosados, un avance significativo en los vinos blancos, que siempre fueron la cenicienta de la zona. El jurado, algo más reducido en esta ocasión, se trasladó a un amplio restaurante de celebraciones y banquetes situado a las afueras de Jumilla.
En dos sesiones de cata, previa y final, celebradas el 12 y 13 de mayo con parámetros propios de los concursos internacionales, concedieron 30 medallas y tres menciones especiales.
Las medallas de oro, otorgadas a vinos con una calificación media superior a 85 puntos sobre 100, fueron para Juan Gil ‘20, de Bodegas Juan Gil, y Verdejo Mediterráneo ‘20, de Bodegas Pío del Ramo, en vinos blancos. Silvano García Pink ‘20, de Bodegas Silvano García, fue el mejor rosado.
En tintos jóvenes sin madera de las cosechas ‘20 y ‘19 se dieron cuatro oros: Luzón Colección Monastrell ‘20, de Bodegas Luzón, Honoro Vera ‘20, de Bodegas Juan Gil, Señorío de Tobarra ‘19, de Bodegas Nuestra Señora de la Encarnación, y Burma del Estrecho de Marín Paraje Marín ‘19, de Bodegas Finca Elena. En la categoría de tintos de esas mismas cosechas que entraron en contacto con madera se otorgó oro a Sivano García 4 Meses ‘19, de Bodegas Silvano García, y Olivares ‘19, de Bodegas Olivares.
Otros dos oros se concedieron a tintos anteriores a 2019: Éxodo Roble ‘18, de Bodegas Delampa, y Lunático ‘18, de Esencia Wines. En la categoría de tintos crianza bubo otros cuatro máximos galardones: Thader ‘18, de Esencia Wines, Casa de la Ermita ‘18, también de Esencia Wines, Luzón Colección ‘18, de Bodegas Luzón, y Castillo de Jumilla ‘17, de Bodegas Bleda.
No hubo galardones en la categoría de tintos reserva pero se concedieron tres oros a otros tantos tintos dulces: Amatus ‘19, de Bodegas Bleda, Silvano García ‘19, de Bodegas Silvano García, y Lácrima Christi, de Bodegas BSI.
Finalmente, las tres menciones especiales fueron para el blanco Verdejo Mediterráneo ‘20, como mejor vino ecológico, y los tintos Luzón Colección ‘20, mejor tinto de Monastrell sin madera, y Silvano García 4 Meses ’19, mejor tinto de Monastrell con paso por barrica.
Deje su comentario
Debe estar logged in para comentar.