Madrid, 17 de junio de 2010.- RP.- Un clima de preocupación ha alcanzado a las Denominaciones de Origen vitivinícolas catalanas tras el anuncio por parte de la Generalitat de integrar el Instituto Catalán de la Viña y el Vino (INCAVI) dentro del Instituto de Investigación y Tecnología Agroalimentaria (IRTA), un organismo que ajusta su actividad al ordenamiento jurídico privado, como medida anticrisis. Aunque no hay aún plazo previsto para dicha integración, las once denominaciones (a excepción de Cava, cuyo reglamento ampara vinos elaborados en más comunidades autónomas además de Cataluña) han lanzado un comunicado conjunto expresando su temor e incertidumbre por “la situación de indefinición que se crea en la administración de las DDO y en buena parte del sector vitivinícola”.
El INCAVI se encarga actualmente de tutelar y administrar todo el vino catalán, no solo el amparado por una denominación de origen, y entre sus competencias está la promoción de los vinos, la creación o suspensión de los Consejos Reguladores y la coordinación y asesoramiento de estos.
La medida, que aún no es efectiva y está pendiente de aprobación, requeriría un cambio en la ley por la cual se puso en marcha el INCAVI; algo que previsiblemente llevaría un tiempo que podría exceder el plazo hasta las próximas elecciones comunitarias, previstas a final de año.
Los consejos reguladores manifiestan su pesar por los recortes que ha sufrido el Departamento de Agricultura, los “más importantes” dentro del conjunto de medidas ante la crisis, factor que ha desencadenará “la pérdida del INCAVI y también de PRODECA (Promotora de Exportación de Catalunya)”. En palabras del presidente del Consejo Regulador de la Denominación de Origen Catalunya, Xavier Pié, “nos preocupa quedarnos sin el impulso que supone el INCAVI, sin un interlocutor claro”, ya que se trata de “un organismo que aglutina el vino desde la viña hasta la comercialización. Si desaparece y queda troceado, nosotros no tendríamos capacidad de regularlo”, comenta. Pié manifiesta también sus dudas sobre “qué cambios va a comportar” la integración del Instituto, y añade que “hay dudad y cuestiones jurídicas que es difícil que el IRTA asuma”, por lo que la situación que quieren dar a conocer es de “desconcierto” según sus palabras.
A las circunstancias actuales se suma, según el comunicado, el proceso de adaptación de la reglamentación de los Consejos Reguladores a la Organización Común de Mercado (OCM) del vino, con cambios que afectan tanto a las Denominaciones como a la propia Ley del Vino catalana, lo que genera también presión por la posible paralización de los trámites para adaptarse.
El Director General del INCAVI; Oriol Guevara, aclara que la medida es fruto de una optimización de recursos para atajar la crisis, y que precisamente tiene que ver con ella y con la sociedad. Explica, citando al consejero de Agricultura de la Generalitat, Joaquim Llena, que el INCAVI no va a desaparecer, recalcando que tampoco desaparecerán los servicios que presta, aunque entiende la preocupación de los Consejos Reguladores. Además, recuerda que será un proceso lento que apenas se está poniendo en marcha, ya que implica un cambio en las leyes, por lo que no se concretará a corto plazo.
Las Denominaciones catalanas reclaman más información sobre este procedimiento de integración y piden participar en las decisiones, además de “reconducir el proceso para que el sector, dada su importancia, pueda tener una Administración propia”.