Manuel Louzada, ex Numanthia, nombrado director general
Madrid, 31 de julio de 2015.AP.- El grupo SPI, con sede en Luxemburgo pero propiedad del millonario ruso Yuri Scheffler, es desde el pasado miércoles el nuevo propietario de Vinos de Pago de Arínzano, una de las cuatro sociedades que integran el grupo bodeguero construido por la familia Chivite en Navarra y Rioja. Manuel Louzada, enólogo portugués responsable hasta hace pocas semanas de Bodega Numanthia (DO Toro), ha sido nombrado director general del grupo bodeguero de SPI, que integra bodegas en Argentina, Toscana (Italia) y la recién adquirida firma navarra.
Vinos de Pago de Arínzano, como el resto del grupo navarro-riojano, estaba incluído en el Fondo Fénix, constituido por los principales bancos por firme sugerencia del Gobierno español para hacerse cargo de firmas emblemáticas que atraviesan dificultades. El fondo es propietario del porcentaje de acciones de esas empresas equivalente a la deuda que tengan con ellos (en el caso del grupo Chivite se cifraba en el entorno de los 50 millones de euros) y se hace cargo de su gestión hasta dar salida a esa deuda, como es natural casi siempre a través de la venta.
Fueron precisamente los requisitos de ese fondo el principal impedimento para cerrar una operación que se ha prolongado al menos desde principios de este año. Un primer intento se frustró por la exigencia al comprador de justificar el origen del dinero de la operación, una condición que viene impuesta por la política internacional contra el blanqueo de capitales.
Cimientos de vodka
Yuri Scheffler puso las bases de su fortuna (Forbes la cifra en 1.790 millones de dólares) en 1997, cuando compró el vodka Stolichnaya a la sociedad estatal rusa VVO Soyudimport por 285.000 dólares. La operación incluía Moskovscaya (la etiqueta roja; la de Stolichnaya era verde), la otra marca de vodka ruso conocida internacionalmente en época de la Unión Soviética, ambas creadas en la década de los cincuenta y destinadas a la exportación. La compra tuvo consecuencias y, a partir de 2001, con la llegada de Putin al poder, el Estado ruso intentó recuperar la propiedad de esas marcas. El pleito provocó la salida de Scheffler de Rusia y el desdoblamiento de la marca. Mientras se dirime la propiedad, se produce en Estonia la Stolinchnaya que se vende en todo el mundo excepto en Rusia, que sigue fabricando la suya propia. El vodka fue la base de Stoli Group, filial de SPI Group, que también es distribuidora de marcas de todo el mundo (entre ellas los vinos de Freixenet y Miguel Torres) en las antiguas repúblicas soviéticas del Báltico.
La división vinícola se puso en marcha con la compra en 2006 de una parte de las acciones de Frescobaldi, grupo que posee cinco bodegas en diferentes zonas de la Toscana (Italia). En 2011 compró Achaval Ferrer, una de las casas punteras de Mendoza (Argentina). Vinos de Pago de Arínzano es la tercera adquisición pero el magnate ruso, conocido por su pasión por el lujo (su yate Serene es el cuarto más largo del mundo, con 134 metros de eslora, y está valorado en 330 millones de dólares) y por los vinos de primera línea, estudia personalmente otras posibles adquisiciones en California, Chile, Francia y Portugal.
Fichaje portugués
En esa labor ha de participar el nuevo director general de la división vinícola, el portugués Manuel Louzada, que procede del gran grupo del lujo, Louis Vuitton Möet Hennessy (LVMH). Louzada tomó la dirección de Bodega Numanthia (DO Toro) cuando el grupo francés la compró a la familia Eguren, en 2009, cargo en el que a principios de julio fue reemplazado por el francés Stephane Point, que procede del equipo de Bruno Prats, padre de Jean Guillaume Prats, director general del grupo vinícola de LVMH.
Originario de la región portuguesa del Douro, Manuel Louzada tenía ya currículo español desde los años noventa, cuando participó en el frustrado proyecto catalán de Chandon (DO Cava y DO Penedés) y después recorrió las diferentes bodegas que posee el grupo en distintas zonas del mundo. En la última etapa compaginaba la dirección de Chandon Argentina con la de la bodega de Toro.
DO a medida
Vinos de Pago de Arínzano fue el gran proyecto de la familia Chivite. Es una amplia finca situada a orillas del río Ega, con una superficie total de 335 hectáreas de las que 128 están dedicadas a viñedo. La familia Chivite adquirió la propiedad, denominada Señorío de Arínzano (su existencia y el cultivo de la vid aparece documentada en el siglo XI), en 1988 y enseguida hizo de ella la joya de la corona. Inició la plantación de viñas, que habían desaparecido de esa zona en el siglo XIX, y puso en marcha importantes proyectos de conservación del ecosistema, rico en fauna y flora singulares.
Esas viñas han tenido una participación no desdeñable en la excelente gama de vinos Chivite Colección 125, lanzada en los primeros años noventa con motivo del aniversario de las primeras exportaciones de vinos realizadas por los creadores del rosado Gran Feudo. La finca cuenta con una capilla neoclásica de principios del siglo XIX, una casona blasonada y la espectacular bodega, obra de Rafael Moneo, que fue inaugurada en 2008.
En octubre de 2007 la Comunidad Foral de Navarra aprobó la DO de Pago de Arínzano para la práctica totalidad del viñedo del Señorío de Arínzano. Fue una calificación extraña, concedida un año antes de la salida al mercado de los primeros vinos cuando entre las normas para acceder a esa calificación figura una trayectoria de años de prestigio. Tal vez se contabilizaron precisamente los vinos de la marca Chivite Colección 125.
En los últimos años, tras la salida de la empresa familiar del enólogo Fernando Chivite, enfrentado con el resto de los accionistas, los vinos se elaboran bajo la asesoría del enólogo francés Denis Dubordieu, profesor de enología de la Universidad de Burdeos (fue profesor precisamente de Fernando Chivite), propietario de cinco châteaux en Burdeos y asesor de Château Cheval Blanc, pero considerado como una autoridad en el terreno de los vinos blancos. Bajo su mando se lanzó a finales de 2012 el segundo vino de la bodega, Arínzano La Casona, con el que se completa el esquema bordelés de un grand vin, Arínzano, y una segunda marca que aprovecha los descartes de la primera.
Secretos financieros
No ha trascendido el importe de la operación, que se ha rodeado desde el principio de misterio y compromisos de confidencialidad. No obstante, algunas fuentes estiman en torno a 30 millones de euros, con lo que se cubriría una parte importante de la deuda del grupo Chivite, que, tras la reestructuración llevada a cabo en 2013, está formado por dos bodegas en la DO Navarra, J. Chivite Estate Family, con las marcas Chivite Colección 125 y Chivite Finca Villatuerta (la segunda hace referencia a otra propiedad del grupo vecina de Arínzano), y Bodegas Gran Feudo, con la marca Gran Feudo, gama completa de vinos de precio más popular, y Beamonte, dedicada sobre todo a la exportación. La tercera es la riojana Viña Salceda, sobre la que desde hace tiempo sobrevuelan rumores de venta.
MANUEL LOUZADA es un agudo profesional y excelente “Ser Humano”. Con relevantes conocimientos domina diversos idiomas Tanto sus capacidades como habilidades son tanto técnicas como así también de importancia comercial internacional. Este grupo empresario ha elegido muy bien, a puesto el ojo en un gran talento. No olvidemos que Manuel estuvo como Director en Chandon Argentina durante 10 años produciendo excelentes vinos como el Cheval des Andes de Pierre Lurton, Terrazas de los Andes y otras maravillas vínicas del gran grupo. ENHORABUENA!!!