El euro no es culpable

Está en la mente de todos: el euro hizo que un café, un vino o una caña de cien pesetas se convirtiera de la noche a la mañana en un café, un vino o una caña de 166,36 pesetas. Eso es cierto pero sólo parcialmente: transcurridos casi tres lustros PlanetAVino revela que el precio del vino en la tienda (no en la hostelería) no ha subido de forma significativa. En algún caso incluso ha bajado.

PlanetAVino ha buscado vinos de alta calidad a menos de las viejas mil pesetas. Su equivalente directo, sin contar con aumento del coste de la vida y demás, son los seis euros actuales. Con el emblemático billete verde se siguen encontrando muy buenos vinos pero no hay gran diferencia con el estado de cosas de principios de los noventa, años en los que para muchos empezó la crisis, al menos en el sector del vino. La revista ha encontrado, sin necesidad de buscar a fondo, más de medio centenar de vinos de alto nivel a ese precio y, dado que no hay modificaciones llamativas con respecto 2002, ha retrocedido diez años más y ahí sí que ha encontrado cosas que contar. La culpa no es del euro, la escalada llegó en los noventa.
El retrovisor se mantiene en esta entrega de PlanetAVino para explorar la tipología y los sistemas de elaboración de los vinos en Rioja en los últimos cien años. Hemos contado con la complicidad y el testimonio directo de una de las familias punteras del rioja actual. Los Muga hablan de los vinos que hacía el padre de Isaac Muga, del cambio que se produjo a partir de los años setenta con el cambio generacional, los actuales, fruto de la experiencia y de un segundo cambio generacional y los futuros.
Además, hay que sumar la habitual mirada al pasado en la sección Histórica, en esta ocasión dedicada al primer siglo de vida de Freixenet, la casa que domina desde las cercanías de la estación de Sant Sadurní d’Anoia la clasificación internacional de elaboración y venta de espumosos.
El presente de las últimas tendencias marca el artículo sobre los rosados más actuales, los de color muy pálido, casi sin pigmentación, que rompen en los mercados internacionales. O las razones y las consecuencias de otra tendencia de modernidad, esta vez en el cultivo de la vid, con el mantenimiento de las cubiertas vegetales. O el punto adicional de sofisticación que buscan las destilerías escocesas terminando la crianza de sus destilados en barricas que en las que han envejecido vinos.
Esto y mucho más en el número de junio de PlanetAVino, cuyo sumario se reproduce a continuación.