Tras varias semanas desde la última vez, el tiempo no ha pasado en balde y hemos asistido a la aparición de varios vinos en diferentes zonas elaboradoras, unos en casas más que asentadas y conocidas, otros nacidos a la vez que arranca la historia de su bodega. En todo caso, novedades presentes en el mercado nacional con la pretensión única de conquistarnos a partir de sus más que variados discursos. Más allá de que unos gusten más que otros, todos tienen su razón y además vienen a demostrar que, a pesar de inconvenientes, queda mucho partido por jugar en esto del vino y las bodegas trabajan para ofrecer constantemente al consumidor productos que intentan responder a sus intereses y demandas. No me cabe duda que tienen que ser otras tantas las etiquetas que están saliendo al mercado pero éstas son las que he seleccionado de entre las que he conocido o han ido cayendo en mis manos. Si en los próximos meses otras se cruzan en mi camino, no duden que este artículo tendrá su segunda parte. 

Como he señalado, son mayoría los vinos nacidos en el seno de bodegas por todos conocidas que, poco a poco, amplían su oferta vinícola atendiendo a los nuevos tiempos, los nuevos gustos y, por qué no, también a las modas. ¿Qué es si no tendencia el pálido color que van adquiriendo los rosados?, en el extremo opuesto de esos potentes colores, casi tintos, que han definido a estos vinos. El Rosado de Lágrima 2013 de Barón de Ley se cuenta entre esos nuevos rosados. Elaborado con garnacha de las viñas que la bodega riojana tiene en terraza (Finca de los Almendros), y algo de tempranillo, presenta un color delicado, casi violeta, y su amable boca es fresca y frutal. En nariz hay notas de fresa y frutas rojas, y al paladar resulta carnoso, sabroso, suave, con una acidez bien ajustada.
Sin abandonar Rioja, Bodegas Bilbaínas, una casa histórica en la elaboración de tintos, lanza ahora su primer blanco fermentado en barrica (permanece 4 meses con sus lías). Se trata de Viña Pomal 2012, con un 70% de viura que completan con malvasía, el coupage clásico de la zona. Parece ser que en origen esta bodega sí elaboraba blancos, pero ahora recupera la tradición con este nuevo vino, de un color amarillo paja en el que sobresalen notas de fruta blanca (pera de agua) y plátano, junto a gustosos ahumados y tostados, aunque todos aromas finos, muy sutiles. También destaca una nota cítrica que luego aparece en la boca. Es untuoso, con agradable sensación dulce, paso de boca frutal (fruta carnosa) y barrica fina perfectamente integrada. Al final vuelven a apreciarse los aromas que se percibían en la nariz (fruta de hueso). Vino bien elaborado.
Como tercera novedad riojana apunto Nico by Valserrano 2010, una selección de tempranillo (80%), graciano (15%) y mazuelo (5%) de viñas viejas realizada por Jaime de Simón, enólogo de la bodega, para celebrar el nacimiento de su primer hijo, Nicolás, y quien representará a la sexta generación de la familia. Con 21 meses de barrica, es un vino complejo de un color cereza de buena capa, con ribete granate. Aromas minerales, de fruta en confitura, especiados, bombón, juanola, regaliz negro, toffe, torrefactos, nobles y aromáticas maderas. Vino de buena estructura, serio, equilibrado, aterciopelado, fino, elegante, expresivo, de carácter frutal, expresión tánica de calidad y final largo.
En la localidad murciana de Jumilla, Hacienda el Carche sacó hace unos meses su nuevo Infiltrado 2013, una elaboración que a primera vista llama la atención por su original botella y etiquetado, y producto que parece enfocado al nuevo consumidor. Un tinto joven muy fragante, compuesto por un 50% de syrah, un 40% de la autóctona monastrell y un 10% de garnacha, de bonito color picota violáceo. En la nariz hay frutas rojas, mermelada de fresa, palote, notas de herbáceos frescos y una punta especiada al final propia de la zona. Es franco, limpio, aromático, con una buena acidez que le aporta frescura y se agradece, ligeras puntas vegetales y paso de boca ligero y fluido. Final seco de media persistencia con recuerdo floral. Tomarlo un poco más fresco de lo habitual le favorece.

La bodega Paco & Lola, asentada en Rías Baixas y popular por una imagen en la que se imponen los lunares, presenta ahora un nuevo vino que elaboran en Navarra, Paco 2012, compuesto de garnacha y tempranillo? y cuya imagen mantiene la línea de la casa madre. De color cereza granate de media capa, es un vino limpio, de media intensidad, con aromas de fruta en sazón y confitada, notas ahumadas, de pastelería y punta vegetal. Ligero, aromático, con cierta calidez en el paso de boca, el final es agraz pero su viva acidez le aporta jugosidad. Confiemos lime asperezas en la botella.

Sileo 2013 es una de las cinco elaboraciones que acompañan el nacimiento de la nueva bodega catalana AT Roca, el reciente proyecto enológico emprendido por Agustí Torelló Sibill junto a su hijo, Agustí Torelló Roca. En este caso es un tinto de la D.O. Montsant, cuyo nombre se traduce por algo así como “volver a empezar”, lo que define a la perfección esta nueva etapa de los Torelló. Con un 80% de garnacha y el resto de samsó, ha permanecido tres meses y medio en barricas de roble francés (90%) y americano (10%) de segundo y tercer año. La nariz es frutal, con recuerdos a violetas, regaliz y aromas de palote. En boca resulta goloso, hay fruta roja y buena acidez. Es corpulento y amable al mismo tiempo, un vino redondo y equilibrado. A éste le acompañan otras cuatro novedades, dos espumosos reserva, Brut 2012 y Rosado 2012, además de dos blancos, Floral 2013 y Xarel.lo de AT Roca 2013.
Desde la Ribera del Duero, otra de las históricas como es Dehesa de los Canónigos lanzaba el pasado diciembre su vino más joven, Quinta Generación 2012, pues esta generación ya es una realidad en la historia de la bodega. Elaborado con tempranillo. y tras permanecer cuatro meses en barrica americana nueva, muestra un cereza granate bien cubierto. Con buena intensidad en nariz, franco, destacan aromas de fruta bien madurada junto a finos toques ahumados y especiados. No exento de complejidad, con una boca equilibrada, sabrosa, destaca por su golosidad y fluidez en el paso de boca. Final de buena longitud en el que se combinan los aromas frutales con los de su crianza en barrica.
Y para terminar esta selección, opto por dos nuevas etiquetas que llegan a nuestro país desde Argentina y Francia, ambas del poderoso grupo Louis Vuitton-Möet Hennessy (LVMH). Por un lado un monovarietal de malbec llamado Las Compuertas 2009 procedente de un viñedo ubicado a más de mil metros de altura en Las Compuertas, de ahí su nombre, en la región de Luján de Cuyo, donde aseguran “se localiza el mejor malbec del mundo…”. De un profundo negro apicotado, en la cata resulta intenso, con una rica nariz en la que destacan notas balsámicas, de bosque, lácticas, maderas torrefactadas aromáticas, fruta negra en confitura, chocolate. En boca resulta sabroso, maduro, amable, de buen equilibro. Tanino fino y noble, agradable y fresco paso balsámico, con un final seco en el que sale una punta amarga nada molesta. Tinto expresivo. Y finalizamos con un champagne millésime dulce de Moët & Chandon, su nuevo Nectar Impérial, elaborado con 50% de pinot noir, 40% de petit meunier – que le aporta carnosidad– y 10% de chardonnay. Un semi seco de 12º que, a diferencia de lo que a priori uno imagina, muestra una acidez que compensa bien la golosidad de este vino. Carácter frutal, notas de la crianza, con recuerdos a pastelería y vainilla, y un final en el que las notas cítricas le proporcionan una agradable frescura. La boca es cremosa pero llega a mostrar notas amargas de pomelo, aromas que favorecen al vino por compensación. Curiosa novedad.